#flandes en verano

Un día en Blankenberge

Después del éxito del post “Un día en Ostende“, hoy os traemos “Un día en Blankenberge”. Cambiamos el lugar y la compañía, pero no el tiempo: sol y mucho calor. ¡Por primera vez en lo que va de erasmus no había ni una nube en el cielo! ¡Todo despejado! Con estos precedentes, cogimos el tren en la Estación del Sur (“gare de midi”) y pusimos rumbo a esta animada ciudad costera.

Blankenberge es una ciudad mucho más pequeña que Ostende. Su estilo Art-Nouveau, fuertemente utilizado en edificios por toda la ciudad, nos habla de su gran desarrollo en el siglo pasado. Hoy en día (sobre todo el verano) es una ciudad turística, con la playa como su principal atractivo: arena blanca muy fina que se funde con el tranquilo Mar del Norte al horizonte. Su bulevar, a reventar de chiringuitos, restaurantes y tiendas de todo tipo, invita a un agradable paseo de principio a fin.

Recomiendo ver el atardecer en una estructura con forma de pasarela metálica que se adentra 350 metros en el mar para finalizar en una rotonda con un bar y miradores: La Jetée de Blankenberge ¡Espectacular!

Para los amantes del senderismo, a poca distancia de la ciudad, entre Blankenberge y Zeebrugge, se encuentran una serie de lagunas entre dunas, con una vegetación muy variada y diferentes tipos de pájaros. Aquí os dejo el link.

Conoce Blankenberge con nosotros a través del video:

¡Seguimos!

via:erasmusenflandes